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Técnicas para llamar la atención hacia nuestro centro de interés

Centro de interés

Cualquier composición se configura alrededor de un centro considerado una propiedad estructural de la composición. Desde el punto de vista geométrico es un punto, pero desde el punto de vista perspectivo, éste se extiende hasta donde llegue la sensación de equilibrio y estabilidad, puede ser una mancha, una cabeza, una mano, una figura, etc…

En una composición pueden coexistir varios centros ó puntos de interés dependiendo de la complejidad. Estos  generan un estructura con un centro de composición que da estabilidad y equilibrio a la obra.

Los centros de interés interactúan entre ellos generando líneas de fuerza; estás existen pero no son visibles. El equilibrio en la composición se puede conseguir utilizando estas líneas de fuerza, que pueden adoptar diferentes formas como curvas, oblicuas, quebradas, cruzadas o en espiral. Las líneas de fuerza en una estructura compositiva, pueden estar determinadas por la disposición de las formas y combinación de los colores.

Dirección visual

Los elementos visuales crean diferentes relaciones imponiendo un recorrido visual que lleva al ojo hacia los centros de interés, es lo que denominamos dirección visual.
Son internas a la composición y estarían creadas por la organización de los elementos plásticos. Pueden ser:

Representadas:  las creadas por los propios elementos visuales.

Inducidas: No aparecen de forma explícita, sino que son sugeridas mediante miradas de los personajes, por semejanza de color, tamaño, forma, etc …

Técnicas para llamar la atención hacia un centro de interés

Algunas técnicas que podemos emplear para llamar la atención hacia nuestros puntos de interés son:

  • Uso de espirales para concentrar la atención. curvas que convergen en un punto focal.
  • Manchas que llevan al punto focal.
  • Utilizar un señalador ( flecha, triangulo, pluma,  rayo…)
  • Radiación luminosa, telaraña, diana, explosión, llama, o cualquier otro elemento que llame la atención o que haga centrar la vista, por su estructura radial, en nuestro punto de interés.
  • Generar un área brillante en él o cerca del centro de interés.
  • Usar algún temas que llame la atención (conflicto, velocidad, caídas, zambullidas, vuelos, desastre…)
  • Utilizar un objeto de diferente color, forma, tamaño o diferente al resto como centro de interés.
  • Romper el ritmo en la composición.
  • Rellenar el encuadre.
  • Hacer que nuestro punto de interés tenga mayor enfoque y definición que el resto.